Apéndice 1. La Decadencia de la Pintura Española. De Velázquez A Picasso Pasando Por Goya

Introducción

NO es extraño que cuando Goya se plantó en Madrid a los treinta años, buscase con ahínco las huellas de Velázquez en palacios y conventos, ya que museos no había, pues el pintor sevillano seguía siendo el punto de referencia de la mejor pintura española. Su arte personal y genuino, al igual que le sucedería a Goya, no encontró a su muerte continuadores. Lo velazqueño se había evaporado en sus sucesores de la llamada escuela de Madrid, y Velázquez permanecía siendo único en su espléndida obra.

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