La fábula de Narciso
La fábula de Narciso
de Hernando de Acuña
Si un bajo estilo y torpe entendimiento
merecieran llegar a aquella altura
do, señora, llegó mi pensamiento,
y tuviera en esto igual ventura,
pudiera yo contar lo que es sin cuento,
dando a vuestro valor y hermosura
seguridad, cual nadie la ha tenido,
de la ofensa del tiempo y del olvido.
Mas si mi ingenio lo procura y quiere,
razón lo contradice y le castiga,
pues manda que primero considere
a qué puede bastar y a qué se obliga.
Porque de vuestro ser ninguno espere
llegar a decir tanto, que no diga
mucho más el silencio, con la falta
de quien ose emprender cosa tan alta.
Y pues de tanto bien como en vos veo
aun no puede lo menos celebrarse,
lo más, que yo no entiendo, aquello creo,
que aquí tiene mi fe donde fundarse.
Y ofreciendo por...
Está viendo el 2% del contenido de este artículo.
Solicitud de acceso
Solicite el acceso a su biblioteca para poder consultar nuestros recursos electrónicos.
Ventajas de ser usuario registrado.
ACCESO COMPLETO
Acceso sin restricciones a todo el contenido de la obra.
SIN PUBLICIDAD
Sólo información contrastada de prestigiosos sellos editoriales.
ACTUALIZACIÓN
Contenidos de renombrados autores y actualizaciones diarias.
La nueva plataforma del Consorcio ofrece una experiencia de búsqueda de fácil manejo y de gran usabilidad. Contiene funciones únicas que permiten navegar y realizar consultas de manera ágil y dinámica.
Convenios especiales:
Enseñanza
Bibliotecas públicas