La importancia de llamarse Ernesto: Acto III

La importancia de llamarse ErnestoTercer acto de Oscar Wilde Decoración: Saloncito íntimo en la residencia solariega de Woolton. GUNDELINDA y CECILIA están asomadas a la ventana, mirando hacia el jardín. GUNDELINDA.- El hecho de no habernos seguido inmediatamente aquí, como hubiese hecho cualquiera, demuestra, a mi juicio, que todavía les queda algún sentimiento de vergüenza. CECILIA.- Han estado comiendo pastas. Eso parece indicar arrepentimiento. GUNDELINDA.- (Después de una pausa.) Lo que parece es que no se preocupan de nosotras. ¿No podría usted toser? CECILIA.- ¡Pero si no estoy acatarrada! GUNDELINDA.- Nos miran. ¡Qué descaro! CECILIA.- Se acercan. ¡Eso sí que es atrevimiento! GUNDELINDA.- Guardemos un silencio digno. CECILIA.- Muy bien. Es lo único que podemos hacer por ahora. (Entra JACK seguido de ALGERNON. Vienen silbando un aire terriblemente popular de opereta inglesa.) GUNDELINDA.- Este silencio digno parece producir un resultado...

Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadística en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar | Más información