La Regenta:XVII
La Regenta - Capítulo XVII
de Leopoldo Alas
Al obscurecer de aquel mismo día, que era el de Difuntos, Petra anunció a la Regenta, que paseaba en el Parque, entre los eucaliptus de Frígilis, la visita del Sr. Magistral.
-Enciende la lámpara del gabinete y antes hazle pasar a la huerta... -dijo Ana sorprendida y algo asustada.
El Magistral pasó por el patio al Parque. Ana le esperaba sentada dentro del cenador. «Estaba hermosa la tarde, parecía de septiembre; no duraría mucho el buen tiempo, luego se caería el cielo hecho agua sobre Vetusta...».
Todo esto se dijo al principio. Ana se turbó cuando el Magistral se atrevió a preguntarle por la jaqueca.
«¡Se había olvidado de su mentira!». Explicó lo mejor que pudo su presencia en el Parque a pesar de la jaqueca.
El Magistral confirmó su sospecha. Le había engañado su dulce amiga.
Estaba el clérigo pálido, le temblaba un poco la voz, y se movía sin cesar en la mecedora en que se le había invitado a...
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