IXParte Primera (Capitulo IX)de Benito Pérez Galdós Desde que se cruzaron las primeras palabras de aquella conferencia, que no dudo en llamar memorable, cayó Izquierdo en la cuenta de que tenía que ...
VIIParte Primera (Capitulo V)de Benito Pérez Galdós Santa Cruz tardó algún tiempo en dar la debida respuesta. Hacía rayas en el suelo con el bastón. Por fin se expresó así:«Supe que en efecto había ...
IIIParte Primera (Capitulo XI)de Benito Pérez Galdós En los siguientes días, la observadora y suspicaz Jacinta notó que su marido entraba en casa fatigado, como hombre que ha andado mucho. Era la ...
IIParte Primera (Capitulo III)de Benito Pérez Galdós Aquel gran filósofo no se entregó a la desesperación. Viéronle sus amigos tranquilo y resignado. En su aspecto y en el reposo de su semblante había ...
IParte Primera (Capitulo VI)de Benito Pérez Galdós Pasaban meses, pasaban años, y en aquella dichosa casa todo era paz y armonía. No se ha conocido en Madrid familia mejor avenida que la de Santa Cruz ...
IIParte Primera (Capitulo V)de Benito Pérez Galdós -Un huevo crudo... ¡qué asco -exclamó Jacinta escupiendo una salivita-. ¿Qué se puede esperar de quien se enamora de una mujer que come huevos ...
... y hasta peligrosa, y aquella cruz de la Legión de Honor, que ... Pignerol o a las islas de Santa Margarita..., lo ... 20 - 21 - 22 - 23Segunda parte: - 1...
La catedral& 160;: 1de Vicente Blasco Ibáñez Comenzaba a amanecer cuando Gabriel Luna lleg& 243; ante la catedral. En las estrechas calles toledanas todav& 237;a era de noche. La azul claridad del ...
... fresco resultan especialmente recomendables los siguientes colores:1.& 160;& 160;& 160;& 160; Como blanco ... de destacar los frescos de la ermita de Santa Cruz de Maderuelo y de San...
IVParte Primera (Capitulo III)de Benito Pérez Galdós Juanito reconoció el número 11 en la puerta de una tienda de aves y huevos. Por allí se había de entrar sin duda, pisando plumas y aplastando ...
IIParte Primera (Capitulo VIII)de Benito Pérez Galdós Por lo dicho se habrá comprendido que el Delfín era un hombre enteramente desocupado. Cuando se casó, hízole proposiciones don Baldomero para que ...
VParte Primera (Capitulo VI)de Benito Pérez Galdós Hacía mal Barbarita, pero muy mal, en burlarse de la manía de su hija. ¡Como si ella no tuviera también su manía, y buena Por cierto que llevaba a ...
... le ha leído la sentencia. La cruz le pone por cama aquella gente ... -Saetas de Semana Santa -Coplas de Nochebuena - ... andaluzas - Adivina -Acertijos populares
IParte Primera (Capitulo VIII)de Benito Pérez Galdós A poco de acostarse notó Jacinta que su marido dormía profundamente. Observábale desvelada, tendiendo una mirada tenaz de cama a cama. Creyó que ...
IVParte Primera (Capitulo X)de Benito Pérez Galdós Los dependientes que estaban haciendo el recuento y balance, metían en las arcas de hierro los cartuchos de oro y los paquetes de billetes de Banco, ...
A los pies de Venusde Vicente Blasco Ibáñez Primera Parte& 160;: EL ULTIMO CRUZADOIIIEN EL QUE SE HABLA DEL HIJO DE LA «UNIVERSIDAD» DE CANALS Y DE LA VICTORIOSA BATALLA DE LOS TRES JUANESA los pocos ...
Napoleón en Chamartín& 160;: 1de Benito Pérez Galdós El Sr. D. Diego Hip& 243;lito F& 233;lix de Cantalicio Af& 225;n de Ribera, Alfoz, etc., etc., conde de Rumblar y de Pe& 241;a-Horadada, hac& 237 ...
VIIParte Primera (Capitulo X)de Benito Pérez Galdós «No, no, no -gritó Jacinta más bien airada que impaciente-. Ahora mismo... ¿Crees que yo puedo dormir en esta ansiedad?».-Pues lo que es yo, ...
VIParte Primera (Capitulo X)de Benito Pérez Galdós No se le cocía el pan a Barbarita hasta no aplacar su curiosidad viendo aquella alhaja que su hija le había comprado, un nieto. Fuera este apócrifo ...
La Corte de Carlos IV& 160;: 1de Benito Pérez Galdós Sin oficio ni beneficio, sin parientes ni habientes, vagaba por Madrid un servidor de ustedes, maldiciendo la hora menguada en que dej& 243; su ...
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