El retrato de Dorian Gray& 160;: 11de Oscar Wilde Durante años, Dorian Gray no pudo librarse de la influencia de aquel libro. O quizá sea más exacto decir que nunca trató de hacerlo. Encargó que le ...
Ilustración del Beato de Gerona, del siglo X (Biblioteca del Centro de Humanidades del CSIC)Miguel Cabañas Bravo (Instituto de Historia, CSIC)LA INSTITUCIONALIZACIÓN Y PROFESIONALIZACIÓN DE LOS ...
Leconte de Lislede Rubén Darío De las eternas musas el reino soberanoRecorres, bajo un soplo de vasta inspiración,Como un rajá soberbio en su elefante indianoPor sus dominios pasa de rudo viento al ...
Aita Tettauende Benito Pérez Galdós Segunda parte - Capítulo IIIEn las acciones del 20, 22 y 25 de Diciembre, repitieron los moros su intento de interrumpir los trabajos del camino de Tetuán. Pero en ...
Artífice rarísimo que a Apelesde Lope de Vega A un pintor enamorado de una dama cuyo retrato hacíaSoneto 192& 160;& 160;& 160;Artífice rarísimo que a Apeles, a Zeuxis, a Parrasio, a Metrodoro,vencéis ...
Capítulo VII& 160;07Pág. 07 de 07Dulce sueñoEmilia Pardo Bazán Dulce Dueño - I -Al llegar a Madrid, en enero, todavía muy floja y decaída, me ven sucesivamente dos o tres doctores de fama. Hablan de ...
Grito de gloria& 160;: 36de Eduardo Acevedo Díaz Ella present& 237;a la proximidad de un gran dolor.Pero era uno de esos temperamentos que lo sofocan, que lo reconcentran y lo anidan en el pecho ...
EL descanso en el pequeño pueblo de Stralau: la calma imponente, los pescadores con sus redes; el aire más puro contribuye a fortalecerlo físicamente. Pero parece haber acrecentado su exaltación. Lo ...
Las mil y una noches Historia del visir del rey Yunan y el médico Ruyande Anónimo El pescador dijo:"Sabrás, ¡oh, efrit , que en la antigüedad del tiempo y en lo pasado de la edad, hubo en la ciudad ...
Las mil y una noches - Tomo II Y cuando llegó la 135ª nochede Anónimo Y CUANDO LLEGO LA 135ª NOCHEElla dijo:Y dichas estas palabras, se alejó; y después de haber escondido la carta entre sus ...
Vos, de Pisuerga nuevamente Anfrisode Lope de Vega A don Francisco de QuevedoSoneto 128& 160;& 160;& 160;Vos, de Pisuerga nuevamente Anfriso, vivís, claro Francisco, las riberas,las plantas atrayendo ...
Brenda& 160;: 9Primeros celajesde Eduardo Acevedo Díaz La se& 241;ora Orfila de Nerva, viuda de un hombre distinguido, viose a la muerte de su esposo sin familia y poseedora de una importante fortuna ...
De hoy más, claro pastor, por quien restaurode Lope de Vega Al doctor TejadaSoneto 167& 160;& 160;De hoy más, claro pastor por quien restaurola fama, que sin vos perder pudiera,os cantarán del Tajo ...
Dejadme un rato, pensamientos tristesde Lope de Vega Soneto 42& 160;& 160;& 160;Dejadme un rato, pensamientos tristes, que no me he de rendir a vuestra fuerza.Si es gran contrario Amor, amor me ...
Esta es la versión para imprimir de El papá de las bellezas.Si imprimes esta página, o eliges la opción de Vista preliminar de impresión en tu navegador, verás que desaparecen este cuadro, los ...
La princesa y el granuja& 160;: 4 de Benito Pérez Galdós Nuestro personaje se hallaba en ese estado particular de exaltaci& 243;n y desvar& 237;o en que aparecen los h& 233;roes de las novelas ...
Brisas de primavera Pedro y Pericode Julia de Asensi Ocho años hacía que el príncipe Pedro había contraído matrimonio con la princesa Rosalía, la mujer más buena y más hermosa de su época, sin que ...
Crimen y castigo Cuarta Parte: Capítulo Ide Fiódor Dostoyevski Debo de estar soñando todavía ‑volvió a pensar Raskolnikof, contemplando al inesperado visitante con atención y desconfianza‑ ¡ ...
Cuando digo a Lucinda que me matade Lope de Vega Soneto 135& 160;& 160;& 160;Cuando digo a Lucinda que me mata y que me hiela y juntamente enciende,libre responde que mi mal no entiende,como quien ya ...
David CopperfieldSegunda Parte: Capítulo XIIIde Charles Dickens Durante todo aquel tiempo había seguido amando a Dora más que nunca. Su recuerdo me servía de refugio en mis contrariedades y mis penas ...
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